DESCUBRE ICA, CHINCHA Y PISCO

En la Tierra del vino y del pisco, el jugo de la uva se envuelve en ensoñaciones, como los verdes valles de Chincha, Pisco e Ica. Chincha, con sus campos de algodón, donde emergen pueblos como El Carmen, célebre por la singularidad de las expresiones de su población afrodescendiente. Pisco, donde la brisa del mar siempre cercano se confunde con la libertad  La Reserva Nacional de Paracas, hogar de lobos marinos e infinidad de aveces costeras. Ica, urbana y moderna, junto al oasis más famoso del Perú, la laguna de la Huacachina, que embruja a los numerosos visitantes de todo el mundo.

CHINCHA

Chincha es una ciudad que se recupera del terremoto que azotó la zona en el año 2007. Sus playas, como Las Tortoritas o Lurinchincha, están relativamente cerca, pero lo bastante apartadas como para tomarse un descanso.

SANTUARIO DE MELCHORITA

Es un pequeño bulevar donde artesanos del distrito de Grocio Prado confeccionan y venden souvenirse de junco o de totora, y es, ante todo, el lugar donde esta ubicado el Santuario de Melchorita, beata popular venerada en los lugares más apartados del Perú. 

PISCO

Fundado como villa en 1640, por orden del virrey Marqués de Mancera, es hoy una pequeña ciudad de pescadores y comerciantes.

RESERVA NACIONAL DE PARACAS

Abarca extensos desiertos salitrosos y hermosas playas, como Lagunillas, La Mina, Salinas y El Chaco; además de uno de los mares más ricos en vida marina.

ISLAS BALLESTAS

Se encuentran a 10 millas de la playa El Chaco (una hora en deslizador). El recorrido dura de dos a tres horas, y aunque no se permite desembarcar, la gran variedad de aves y lobos de mar son fácilmente distinguibles desde las cómodas lanchas a motor. 

ICA

Es una cuidad situada en el medio del desierto, calurosa en día y con viento frío por las noches. Ica es conocida por sus importantes desarrollos económicos como en la agroexportación y sus famosas bodegas de pisco y vino, como Vista Alegre, Viña Tacama y Ocucaje.

LAGUNA DE LA HUACACHINA

Entre las dunas, rodeada de palmeras, aparece como una ensoñación de laguna de la Huacachina, que antaño gozaba de fama gracias a las propiedades medicinales de sus aguas provenientes de filtraciones subterráneas. En la actualidad, es un tranquilo balneario, ideal para descansar y disfrutar del paisaje. En sus alrededores, el viajero aventurero tiene la oportunidad de practicar sandboard o deslizamiento en arena.